Mercado Central: El Zoco (también llamado Souk Elhed) es uno de los más grandes del Magreb y supone todo un espectáculo de colores, aromas y sabores. Frutas, verduras, carnes, pescados pero también artículos de decoración, souvenirs o ropa. No olvides que el regateo es casi obligatorio.
Ayuntamiento y alrededores: El Ayuntamiento de Agadir es un edificio moderno construido en los años 60. Un terrible seísmo destruyó completamente el centro histórico de la ciudad a comienzos de esa década y el Gobierno del país decidió entonces levantar una nueva ciudad orientada, como comentábamos anteriormente, al ocio y al turismo. Para recordar la tragedia se construyó el Muro de la Memoria, justo en frente de la Casa Consistorial.
Mezquita de Mohamed V: No podrás visitar su interior pero aún así merece la pena acercarse hasta el barrio de Nouveau Talborjt para contemplarla. Es la mayor mezquita de la ciudad.
Jardín Olhao: Un pulmón verde en pleno centro de la ciudad. Resulta muy agradable pasear bajo la sombra de sus árboles y almorzar en el restaurante que ocupa un rincón privilegiado del mismo.
Playa de Agadir: Sus más de 6 kilómetros de fina arena y aguas prácticamente inmóviles la convierten en una de las paradas obligatorias. Cuenta con todo tipo de servicios como alquiler de barcos, jet sky, y actividades para los niños. Desde la playa puedes acercarte hasta la Mezquita Loubnane dando un corto paseo. En el extremo norte de la playa se encuentra el Puerto Deportivo.
Puerto de Agadir: Siendo el primer puerto sardinero del mundo, no hace falta que te digamos cuál es el plato estrella que se sirve en sus tascas y restaurantes.
La Kasbah: Situada en lo alto de una colina, alberga los restos de la antigua fortaleza del siglo XVI que protegía la ciudad. Desde ella las vistas son excelentes. Eso sí, aunque te digan que es posible acceder a pie, te recomendamos que te ahorres los 45 minutos de cuesta y lo hagas en coche.
Birds Valley: La última parada de este paseo por el centro de Agadir es el Valle de los Pájaros, un pequeño zoo de dos hectáreas y media.
Afueras de la ciudad: A unos 10 minutos del centro en coche está la Medina de Agadir, el caso antiguo. Algo más lejos, al norte de la ciudad, se sitúa el Valle del Paraíso, con su hermoso palmeral rodeado de olivos, almendros y arganes. La Garganta de Asif Tamraght te deparará una de las mayores sorpresas del viaje: unas piscinas naturales donde darse un refrescante baño tras haber visitado la Cascada de Uadi Tinkert, un precioso caudal que se desliza por paredes blanqueadas por los depósitos de calcio que se conoce como “el velo de la novia”. Acércate hasta ella en invierno porque de lo contrario no encontrarás agua. A 40 km. de nuestro destino se encuentra el Cabo Rhir, un alto farallón sobre el océano cuyas vistas te dejarán sin palabras.